Una de las visiones más características de Islandia sin duda es la famosa formación rocosa, comúnmente llamada Troll, rinoceronte, dinosaurio… que en islandés se denomina como Hvítserkur (que no sé lo que significa). Es una formación rocosa basáltica que se aguanta por los pelos, tanto, que se puede apreciar en el foto donde le han puesto un refuerzo de hormigón para que no se venga abajo.
Localizado en la parte norte de Islandia, y en una localización que requiere explícitamente desviarse por una pista de grava para ir a verlo, se encuentra en una playa de arena negra que se puede acceder tanto con marea alta como con baja. Eso sí, con dos opciones, por un camino normalito de cierta pendiente que requiere una gran vuelta para llegar hasta él. O por un camino de gran pendiente que requiere algo más de cuidado para bajar si queremos conservar todos nuestros dientes.
Como no teníamos mucho tiempo de ir a buscar otras localizaciones, nos quedamos en la zona tanto para atardecer como amanecer. Esta es una foto de atardecer, donde antes de llegar hasta la formación rocosa nos pasamos por una zona donde se podían ver a lo lejos leones marinos… bueno, tan lejos que tenían el tamaño de unos pocos pixeles cuando le hice una foto con mi 70–200.
La puesta de sol no prometía mucho, teníamos un cielo completamente despejado. Cuando se puso el sol unas nubes empezaron aparecer poco a poco, pero no pillaron color. Sin embargo, con la marea alta, me valieron para darle de aspecto más irreal a la situación con una larga exposición usando un filtro de 10 pasos.
Troll Islandés [Sony A7 II (Amazon, eBay) con Sony 24-70 2.8 GM (Amazon, eBay). Foto sacada a ISO100, f13, 163 segundos de tiempo de exposición. Trípode y disparador remoto utilizado]. © David García Pérez 2017.