En mi artículo sobre como imprimir en Adobe Lightroom pasa a paso comenté el concepto de puntos por pulgada ó PPP a la hora de imprimir una imagen en papel (en la literatura también os los podéis encontrar este término referenciado como DPI, de su acrónimo en inglés Dots Per Inch). Este término es un concepto muy sencillo, pero que se le atraganta a mucha gente nada más comenzar con él.
Veamos si con un pequeño ejemplo dejo este concepto claro. Mi cámara actual, una Canon 40D (sí, ya es una veterana), genera unos ficheros en RAW de un tamaño de 3888×2592 píxeles, del entorno de unos 10 megapixeles. Mientras tengamos la imagen así, en fichero en nuestro disco, que al abrirla en programas como Adobe Photoshop nos diga que tiene una resolución de 240 ppp o lo que sea, es irrelevante. Para nosotros la imagen va a ser de 3888×2592 píxeles.
Ahora, imaginaos que queremos imprimir dicha imagen. Si la imprimimos a una resolución de 240 ppp, el resultado será una imagen de 41,15 cm x 27,43 cm en papel. Al imprimir, el ordenador le dirá a la impresora que tome los 3888×2592 píxeles y que los vaya imprimiendo de tal forma que por cada pulgada de papel entren exactamente 240 píxeles. Sí la imprimimos a 300 ppp, pues la imagen será más pequeña, en concreto de un tamaño de 32,92 cm x 21,95 cm, obviamente debido a que ahora por cada pulgada física entran 300 píxeles de la imagen cuando antes entraban solamente 240. Al revés, si bajamos la resolución a 180 ppp, siguiendo la misma regla de 3, la imagen se imprimirá más grande, en concreto a 54,86 cm x 36,58.