Hay un pequeño detalle de la última versión de Adobe Lightroom, la 4, que me había pasado completamente desapercibido cuando este salió ya hace unos cuantos meses. Viendo el otro día uno de los de los vídeo tutoriales de Michael Frye sobre Lightroom 4 descubrí, o tal vez redescubrí, la propiedad de que el nuevo Proceso 2012, o lo que es lo mismo, Lightroom 4, hace una recuperación automática de luces y sombras de las fotos que importamos.
Amanecer en Ordesa. [Cámara: Canon 40D. Lente: Canon 17-40Lf4. Filtros: Polarizador Heliopan. Exposición: ISO200, f11 y 1,3 seg. Toma sacada con trípode, disparador remoto, y espejo levantado.]. © David García Pérez 2011.
La imagen que voy a usar en este artículo ejemplo es una imagen de alto contraste, donde tenemos unas zonas de sombras muy oscuras, y zonas muy claras, casi llegando a blanco puro. Esta imagen nada más importada en una anterior versión de Lightroom presentaba el siguiente aspecto.
Tengo activado el aviso de sombras y altas luces en Lightroom, esa zona roja en el cielo quiere decir que ahí el cielo está quemado, la pequeñas zonas azules del gran árbol de la derecha de la imagen quiere decir que esa zona es negro puro.
En el histograma de la foto anterior se observa claramente como Lightroom nos avisa que tenemos zonas de negro y blanco puros.
Las zonas marcadas como quemadas y las negro puro realmente no están perdidas, usando las herramientas de recuperación, exposición y negros de Lightroom 3 es fácil recuperarlas, este fichero RAW todavía contiene ese información.
En Lightroom 4 la forma en la que importa las imágenes cambia, nada más leerlas, sí Lightroom detecta que hay zonas que se han ido a negro puro, o zonas de blanco quemadas, intentará de recuperarlas de forma automática (no siempre es posible), mostrándonos una imagen mostrando todo el rango posible antes de dejarnos empezar el proceso de revelado en ella. Cómo podéis ver esto es como muestra por defecto Lightroom 4 la anterior imagen nada más importarla.
Este es el aspecto de la imagen nada más ser importada en Lightroom 4, como podéis observar, Lightroom ha recuperada la información de sombras y luces de forma automática.
Como se puede observar en el histograma de la imagen nada más ser importada, no hay ninguna zona de negro puro ni ninguna zona quemada.
Personalmente lo encuentro como un pequeño detalle últil que te ahorra gran parte de trabajo previo, dónde tenías que recorrer las imágenes una a una intentando averiguar si las zonas oscuras o claras todavía conservaban información que poder recuperar y así no desechar la foto por que la expuse mal en el campo.