Ya hace un par de semanas leía el artículo: How high ISO has revolutionazied photography – and why dynamic range is next (¡Cómo el ISO alto ha revolucionado la fotografía y por qué el rango dinámico es lo siguiente!) y realmente no puedo estar más de acuerdo. Y para demostrar esto vamos hacer un poco de repaso histórico, aunque resulte irónico para una persona que saca la mayoría de sus fotografías a ISO 100.
Anochece en los Pirineos [Canon 5D Mark II con Canon 70–200f4L IS. Toma sacada a IS0200, f7,1 y 0,3 seg. Trípode y disparador remoto utilizado]. © David García Pérez 2015.
Cuando pensamos en sensores de cámaras digitales solemos pensar en su ISO más alto que nos da resultados que no sean simplemente ruido, su cantidad de megapíxeles y, en mucha menor medida aunque cada vez pillando más relevancia, rango dinámico. Pero veamos poco a poco como evolucionó cada uno de estos parámetros.
El mundo de las cámaras digitales profesionales empezó a evolucionar poco a poco en la década pasada. Varios modelos fueron apareciendo pualatinamente, cada uno de ellos incrementando la cantidad de megapíxeles, hasta que Canon dio el batacazo. En agosto de 2007 presentó la 1Ds Mark III, su primera cámara con 21 megapíxeles (en esta historia estoy dejando un poco de lado los respaldos digitales de medio formato). En la carrera de los megapíxeles Canon empezaba a sacar ventaja.
La 1Ds Mark III, a pesar de tener bastante éxito en profesionales, sobretodo para fotografía de estudio y/o paisaje, no hizo tanto daño en el mercado como lo que salió al año siguiente, la Canon 5D Mark II. De nuevo, otra cámara con sensor de 21 megapíxeles, mucho más barata que la serie 1 de Canon y con mejor calidad ISO que la anterior.
La 5D Mark II permitiría hacer cosas con ISO que antes no se hacían, sobretodo en temas de fotografía nocturna. Disparar a ISOs 3200 o 6400 empezaban a ser común, y con buenos resultados, algo totalmente impensable unos años antes, y aún más si recordamos la época de película.
En temas de ISO los demás fabricantes se pusieron rápidamente a la altura. En tema de megapíxeles las cosas tardaron un pelín más. Pero todo parecía tranquilo. Entre 20 a 24 megapíxeles parecía que se estaban conformando todos los fabricantes de cámaras de 35 mm (en medio formato saltarían a 80 Megapixeles en febrero del 2011, con el respaldo digital Phase One IQ180).
Pero estos 5 años de tranquilidad en la carrera de megapíxeles pronto tendrían fin, Nikon lanzaba su cámara con sensor de 36 megapíxeles, la D800/D800E (el sensor es fabricado por Sony). Muchos fotógrafos saltaron a ella por esa resolución extra que ya empezaba a mostrar que esas lentes que algunos creían pata negra fallaban en los bordes. Pero sin embargo, más que los megapíxeles, uno empezaba a escuchar pasado el tiempo otro comentario: el sensor era capaz de registrar hasta 14 pasos de luz de rango dinámico.
Tal vez para alguien que hace fotos de moda, bodas, estudio, etc. este factor no era importante, pero a la gente que le gusta hacer fotografía de paisaje, que se levanta para pillar amaneceres y se acuesta tarde para pillar atardeceres era un dato relevante. Uno ya no tenía que recurrir tanto a técnicas como HDR o filtros degradados para ser capaz de capturar las escenas que tenía delante. Todo esto con un excelente ISOs altos.
Nikon disfrutaría de una año de esta exclusividad, hasta que Sony decide que esto de las cámaras réflex no es tan divertido como esperaban y sacan las primeras full-frame sin espejo al mercado, la A7 y A7r, la última con el mismo sensor de 36 megapixeles que tiene la D800/D800E (después de todo lo fabrican ellos).
Y mientras la resolución seguía aumentando y la gente se acostumbraba hacer fotos a ISO 6400 sin despeinarse, Sony aún tenía un nuevo as en la manga para que la gente se fijase aún más en su serie de cámaras de formato complejo sin espejo, la A7s. La verdad es que cuando la vi pensé que la cámara no resultaba muy interesante. Su máximo atractivo, poder grabar a 4K, hacía falta tener un grabador externo que costaba tanto que la cámara misma, haciendo que su precio no resultase tan atractivo para otras alternativas para grabar vídeo. ¡Qué equivocado estaba!
Subestimé la capacidad de disparar a ISOs altos con la cámara. Para gente que graba vídeo esto se convirtió en una de sus grandes ventajas, podían grabar escenas nocturnas fácilmente, a ISOs por encima del 6400 y con poco ruido, siendo fácil de corregir en post-producción. Si seguís cualquier foro o blog sobre vídeo, veréis que la A7s se ha convertido en una pequeña cámara de culto (y con un sensor que Sony ya ha dejado claro que por el momento no se lo presta a nadie).
Si os fijáis, desde el 2008 no ha vuelto a mencionar el nombre de Canon. Mientras que a ISOs altos no tenían mucho problema, en temas de rango dinámico (a ISOs bajos, el que me importa a mí, 99% de mis fotos son a ISO100) y resolución hacía tiempo que se habían quedado atrás. No es que esto afectase especialmente a sus ventas, dado que seguían y siguen siendo el fabricante que más cámaras de lentes intercambiables vende en el mundo. Pero desde luego, si exceptuamos los fanboys, poca gente hablaba bien de sus sensores en los foros (en temas de vídeo hacían cosas interesantes).
Este año decidieron dar un pequeño golpe en la mesa y anunciaron la nueva serie 5Ds/5Ds R. Una cámara con un sensor de 50 megapíxeles. Curiosamente limitada a ISO 6400, no queda muy claro si por alguna limitación técnica, decisión de diseño, o decisión de marketing (para que cuando saquen la 5D Mark IV esta tenga el atractivo de tener un ISO más alto). Hace falta que alguien haga un análisis de rango dinámico, pero si damos por ciertos los comentarios de algunos directivos de Canon será el mismo que el de la 5D Mark III, con lo cual lo sensores Sony seguirán ganando en este aspecto por goleada… pero hace falta que alguien evalúe la cámara parcialmente.
No dudo que Sony y Nikon seguirán los pasos de Canon más pronto que tarde y saquen un sensor de 50 megapíxeles o similar. Pero no me preocupa, me interesa más que ese sensor Sony pueda superar la actual rey de rango dinámico, la Nikon D810 (sí, el sensor también lo fabrica Sony). Con 14,8 pasos de luz, estos sensores cada vez se aproximan más al rango dinámico que un ojo humano puede ver. No es que me importe mucho este aspecto, pero si esto me ayuda a no tener que usar filtros degradados y no tener que recurrir a HDRs, mejor que mejor. El ISO y la cantidad de megapíxiles por mí lo pueden dejar como está (una vez tengamos el rango dinámico, volveré a insistir en los otros aspectos).
¿Por qué la coletilla del título de “por el momento”? No lo digo por seguir la anterior frase donde después los fabricantes pueden empezar a subir megapíxeles y ISO, no, lo digo por que a ver si nos olvidamos de una vez de la dichosa matriz de Bayer. Sensores como los foveon que montan las cámaras Sigma son insuperables en cuanto a reproducción de color y detalle (para ser una cámara de 14 megapíxeles). El único problema que tienen es que mejor no las saques de ISO 100 y no hay un buen revelador de sus ficheros RAW (sino, aún me pensaría pillar alguna).
Los sensores foveon nos darían mejor color, pero también tenemos el problema de que aumentar los megapíxeles supone problemas a la hora de diseño de lentes. Los rayos de luz en las esquinas tienen que llegar lo más perpendiculares posibles, esto creó muchos problemas en cámaras técnicas con respaldos Phase One cuando sacaron su IQ180 de 80 megapíxeles. Con lentes grandes angulares se producían variaciones de color difíciles de corregir (hasta que actualizaron el Capture One). También pasa lo mismo con la Sony A7r y algunas lentes adaptadas a la misma (especialmente los grandes angulares de Leica). Estas lentes no estaban diseñadas para trabajar tan cerca del sensor con tantos megapíxeles, y por tanto que cada píxel captura poca luz, introduciendo en las esquinas cambios de color y nitidez inesperados.
Fueron, son y serán tiempos interesantes para la evolución de lo que podremos hacer con una cámara digital. Esto no acaba más que empezar.