Ansel Adams es probablemente uno de los nombres más famosos en fotografía de paisaje, sino el que más. Este libro póstumo recopila 400 de sus más representativas fotografías. Es una colección que intenta recoger distintos periodos del autor, desde sus comienzos a sus fotografías en sus últimos años de vida.

En este vídeo podéis ver mi reseña del libro, pero creo que se me ha quedado más en un tema biográfico que la reseña del libro en sí:

• Edición en inglés: Amazon ES (afiliado)
• Edición en castellano: Amazon ES (afiliado)

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José Santiago me preguntó en mi primer preguntas y respuestas sobre la relación entre tamaño de sensor y profundidad de campo. Pero no fue hasta después de que le contestase hasta que me volvió con su duda más interesante relacionada con este tema.

Nevadas en Montseny [Sony A7 II con Canon 70-200f4 IS L. Foto sacada a ISO800, f13 y 1/13 de segundo de tiempo de exposición. Trípode y disparador remoto utilizado]. © David García Pérez 2017.

Pregunta:

Muchas gracias David por tu pronta respuesta y la solución a las dudas que tenía creadas; Aunque, con el formato medio, si dices que tiene menos profundidad de campo ¿Cómo es posible que el legendario Ansel Adams, trabajando con la barbaridad de cámara encima del coche, podía tener la nitidez y profundidad de campo que mostraba en sus fotografías cuando fotografiaba esos paisajes? Es algo que no acabo de entender.

No sé si sabes que Ansel Adams fue uno de los fundadores del Grupo F/64. Los motivos de creación del grupo y sus reivindicaciones darían para todo un libro (es más, estoy leyendo uno al respecto: Group f.64: Edward Weston, Ansel Adams, Imogen Cunningham, and the Community of Artists Who Revolutionized American Photography). El nombre viene dado de usar f/64 cuando sacaban fotos para conseguir la mayor nitidez posible. Si alguna vez has oído hablar de difracción, supongo que estarás alarmado, eso de que no pasemos de f13 por qué la imagen se vuelve suave, es cierto, en cámaras de 35mm, pero en cámaras de gran formato, eso se nota menos, y mucho menos usando película, que tenía mucha menor resolución que las cámaras digitales actuales. Por lo tanto, conseguían mayor profundidad de campo cerrando más la lente, que las lentes de largo formato lo permiten. Pero no solamente eso. Adams empleaban cámaras técnicas habitualmente, las cámaras técnicas permiten movimientos para cambiar el plano de enfoque, tal y como comento en este vídeo sobre lentes Tilt-Shift: Tilt para fotografía de paisaje.

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La web Advance Your Photography lleva ya un tiempo sacando pequeños vídeos de las visitas que han hecho a la casa donde vivía el mítico fotógrafo: Ansel Adams, principalmente conocido por su trabajo de fotografía de paisaje, aunque en estos vídeos también tocan temas como sus talleres, fotografías comerciales, o sus libros (todos los vídeos están en inglés).

El primer vídeo nos explica como era la máquina que usaba Ansel Adams para ampliar sus fotografías:

El segundo vídeo hablan con su hijo y tratan temas como su fotografía, sus talleres o su fotografía comercial, mucho menos conocida:

Por último, el tercer vídeo, hablan con su hija política y como ella administra la tienda que vende sus obras en Yosemite y organizaba sus talleres:

Sin duda, uno de los referentes para cualquier persona interesada en la fotografía de paisaje.

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Supongo que ahora mismo estoy acostumbrado al formato de documental actual y se hace un poco extraño ver un documental de este estilo de 1958, pero desde luego merece la pena para ver al maestro Ansel Adams en acción, fotografiando con cámaras que iban desde la técnicas de largo formato a polariods, o revelando fotografías en su estudio (buenísimo el momento que aclara y oscurece por zonas la imagen).

Eso sí, el documental está en inglés.

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Ninguna gran cantidad de tecnología transformará una película mala en una buena

John Lasseter

Estaba viendo el otro día las entrevistas de que All Things D hizo a Steve Jobs cuando le escuché decir esta frase sobre las películas de Pixar. En ese momento pensé que, esto tan obvio, también se puede aplicar a la fotografía. Como podéis observar en este blog soy una persona que se fija bastante en los aspectos técnicos de la fotografía, pero siempre hay que tener en cuenta que realmente lo importante es lo que se está fotografiando, su encuadre, la historia que nos cuenta… vamos, la parte artística. Por qué como dicen que decía Ansel Adams, no hay nada peor que una fotografía técnicamente perfecta de un concepto difuso.

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El negativo es comparable a la partitura de un compositor y la impresión a su interpretación. Cada interpretación difiere en detalles sutiles.

Ansel Adams.

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Siguiente artículo de esta pequeña serie que empecé sobre como fotografíe las Illas Cíes y como después ya procesé la imagen. Por el momento ya hemos visto como fue el proceso de la toma, para después ya en casa y delante del ordenador ajustar el tono de la imagen, y acto seguido el color de la misma. Y después de todo esto, así nos había quedado la imagen.

Illas Cíes – Después de ajustar el color. © David García Pérez 2009.

¿Qué nos queda ahora? Pues básicamente ajustar el detalle de la misma. Ahora un pequeño concepto que introduzco aquí sobre RAW. Yo saco mis fotografías en RAW, si este original hubiese sido en JPEG, probablemente no le hubiese hecho todo esto, dado que no tendría mucho sentido (esto para otro artículo). Como todas las fotos en RAW, siempre hace falta aplicarle un filtro de detalle de «captura.» Habitualmente cuando sacamos las fotos en jpeg, la cámara automáticamente hace esto, al sacar la foto en RAW, la cámara no hace este tipo de procesado, simplemente deja la imagen tal como la captura el sensor para que nosotros seamos los que tomemos la decisión.

Entonces me voy al menú de detalle, y le aplico una «Cantidad» de 70. Para ello, al mover el cursor, pulso la tecla «alt» y observo como Lightroom me convierte la imagen a blanco y negro, esto es simplemente para que cuando ajustemos este parámetro no nos distraigamos con el color. De forma visual lo ajustamos hasta que parezca que el detalle mejora pero que no aparezcan artefactos extraños. Ahora, es muy importante que para hacer este proceso pongamos la imagen al menos a un zoom 1:1, que esto significa que 1 pixel en la pantalla se corresponde con un pixel en la imagen, sino, Lightroom estará haciendo una simulación de la imagen y no nos permitirá apreciar correctamente el efecto de esta herramienta.

Captura de como ajustar detalle a zoom 1:1.

Acto seguido ajusto el radio, igualmente pulso la tecla «alt,» esto hace que veamos la imagen en lo que se denomina altas frecuencias, como en este caso tenemos mucha información, bajo el radio. De esta forma todos esos detalles finos se conservan, por ejemplo, si fuese una foto de retrato, subiría el radio a 1.5, no queremos que las arrugas de la cara de una persona se destaquen. No suele ser recomendable pasar de 1.5, aunque la herramienta lo permita.

Aunque con estas capturas no se puede apreciar mucho este proceso, el siguiente parámetro que nos toca es la barra de detalle (sí, la traducción del inglés no es que les quedase perfecta en esta herramienta). Recordar, zoom 1:1. Aquí, de nuevo, pulsando la tecla «alt» movemos el cursor hasta que veamos que se acentúan los detalles de la imagen, pero nunca en exceso.

Por último, queda ajustar la máscara. La máscara nos va a valer para hacer que ciertas zonas de la imagen no se apliquen los cambios que hemos introducido anteriormente. En el caso particular de esta imagen, no me me interesa mucho que se acentúe el detalle en zonas como el cielo o el mar, donde lo que quiero es que queden suaves como se veían al principio de este artículo. Para ello, de nuevo, mientras ajustamos el control de la máscara pulsamos la tecla «alt.» Las zonas que queden en negro según subamos dicho control serán las zonas donde no se aplique los parámetros anteriores de Cantidad, Radio, y Detalle.

Illas Cíes – Después de ajustar el detalle. © David García Pérez 2009.

En el siguiente artículo, tocará corregir el ruido, que por la mala exposición no es poco.

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Tercera entrega sobre como he procesado y sacado mi imagen de las Illas Cíes. Anteriormente ya comenté como fue realizada la fotografía y las consideraciones tomadas durante dicho proceso, y antes que este artículo, hablé de como fue ajustado el aspecto tonal de la misma. Ahora toca pasar a ajustar el color. Este es el aspecto visual de la imagen tal como la había dejado:

Illas Cíes – Después del ajuste de la curva de tonos. © David García Pérez 2009.

En esta imagen nocturna es imposible decir que voy a dejar el color tal y como lo recordaba, es una imagen nocturna, y realmente solamente podía ver lo que iluminaba mi linterna, con la luna detrás de las nubes la luz natural que había era insuficiente para mis ojos. Lo primero de todo ha sido ajustar la temperatura de color de la imagen, básicamente la he hecho más cálida. Simplemente he movido el control de temperatura hasta que me gustó el resultado. El control de tinta no lo toqué, o me hacía la imagen muy verde o muy roja quedando poco natural.

Illas Cíes – Después de ajustar la temperatura de color. © David García Pérez 2009.

Ajuste de temperatura.

Una vez ajustada la temperatura, paso a ajustar mi control favorito en Lightroom, «Intensidad.» Bien, antes de que mi critiquéis, y tal y como se puede observar en mi trabajo, yo abuso completamente del control de intensidad, probablemente no debería subirlo tanto, pero a mí me gusta así, ¡Qué le vamos hacer! ¿Y qué hace la intensidad? Pues básicamente nos permite aumentar de la saturación de la imagen de forma inteligente. Solamente aumenta la saturación aquellos colores que están poco saturados, al resto, los deja tal cual. En este caso particular, después de jugar un rato con el control, lo dejé en 79.

Illas Cíes – Después de ajustar la intensidad del color. © David García Pérez 2009.

Ajuste de intensidad.

Si por el párrafo anterior no lo habíais deducido, hay un control que nunca toco, ese es el de saturación global de la imagen. Prefiero simplemente usar intensidad y cuando quiero hacer algún ajuste más fino saltar al control individual de saturación que se puede encontrar en el menú de HSL. En esta imagen el color cobra especial relevancia, en particular el naranja, así que decidí sobremarcarlo un pelín más aumentando su saturación en un +20.

Illas Cíes – Después de ajustar un poco más la saturación del color naranja. © David García Pérez 2009.

Ajuste de la saturación del color.

Aunque el tono de la imagen ya lo habíamos ajustado en el artículo anterior, ahora podemos hacer un ajuste aún más fino ajustando el tono de cada uno de los colores a través de la pestaña de Luminosidad del menú HSL. Ahí, como veis en la captura de pantalla a continuación, ha oscurecido un pelín más todos los tonos amarillos, rojos y naranjas.

Illas Cíes – Después de ajustar un poco la luminosidad de algunos colores de forma individual. © David García Pérez 2009.

Ajuste de la luminosidad de cada color de forma individual en Lightroom.

Y hasta aquí el ajuste de color de la imagen, simplemente nos queda darle el toque final, un pelín de ajuste del detalle de la misma, y ajustes de reducción del ruido introducido por la cámara y lente. Como veis mi método es bastante básico, ir ajustando poco a poco cada control de Lightroom para ver su efecto (y tener en cuenta que en RAW esto es un proceso no destructivo). Eso sí, suelo casi siempre seguir este orden, no por nada en particular, simplemente por qué me funciona a mí.

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Uno de los libros sobre fotografía que más he disfrutado leyendo es The Making of 40 Photographs de Ansel Adams. En él, Adams coge 40 fotografías y explica lo que ha hecho con ellas, desde la toma inicial hasta el resultado final en impresión. Desde detalles de por qué dicha composición o motivaciones a la hora de sacar la foto, o procesado químico en cámara oscura para hacer que la foto tenga contrastes locales que deseaba, o unas zonas más claras o oscuras que otras. Nada más leerlo, te daban ganas de coger la cámara y salir corriendo hacer fotos. Con esta sección quiero empezar algo parecido, pero de esta vez en lugar de usar una habitación en cámara oscura con procesado químico emplearemos un ordenador.

El primer ejemplo que voy a tomar es una foto que para mí tiene bastante significado, es la primera foto nocturna que me salió bien, y por otro lado, como ya he comentado en otras ocasiones, ha sido la primera foto donde realmente me he planteado que podría llegar a producir cosas que me realizasen personalmente en el mundo de la fotografía. Esta foto es una foto nocturna hecha en las Illas Cíes en verano del 2009, ya ha llovido un poquillo desde aquella. La imagen que enseño a continuación es la imagen finalizada, el producto final.

Illas Cíes – Resultado Final. © David García Pérez 2009.

Bien, esta imagen fue tomada en un encuentro fotográfico de la asociación gallega Phosgalicia. Pasamos un fin de semana en el parque natural de las Illas Cíes, en Galicia. Justo después de hacer fotos a la puesta de sol desde un alto, y de las cuales creo que borré todas, cuando ya era casi de noche empezamos a bajar a buscar mejores zonas para realizar fotos nocturnas. Hicimos alguna que otro intento aquí y allá hasta llegar a la zona del Faro Da Porta. Un pequeño faro que marca el estrecho entre dos de las islas que forman el parque natural.

Todo hay que indicar que esta foto sería imposible realizarla si no fuese por la ayuda de dos de los asistentes al encuentro fotográfico, Marcos y Antonio, que ambos deben tener una foto final muy parecida aunque nunca vi que la mostrasen, la verdad. Hay varias cosas que hacen que esta foto funcionase. De entrada tenemos las luces nocturnas de los alrededores de Vigo, esos puntos brillantes que se pueden ver al final de la foto. Esas luces son las que dan el color naranja a la fotografía. También tenemos uno importante capa de nubes, dichas nubes ayudan a reflejar parte de la luz del pueblo al terreno iluminando mejor la escena. Y por otro lado, aunque no se puede apreciar en la imagen, detrás de la capa de nubes teníamos una luna casi llena, iluminando aún más y de forma difuminada gracias a las nubes, toda la escena.

En las primeras tomas, quedaba claro que el faro iba a quedar negro, tener en cuenta que el faro estaba a contraluz, tanto respecto a la iluminación introducida por la luna, como la iluminación de la ciudad de Vigo y alrededores que se puede ver al final de la imagen. Para solucionar dicho problema, durante la exposición, de más de 1 minuto, disparamos un flash manualmente contra él, para que quedase de color blanco. Hubo que hacer un par de intentos hasta conseguir dar con una intensidad de flash que no quemase el faro o que lo dejase muy oscuro.

Obviamente, se sobreentiende que al ser una exposición de más de un minuto, la cámara esta colocada sobre un trípode y disparada a través de un disparador remoto, con el bloqueo del espejo activado para minimizar cualquier tipo de vibración en la misma.

El resultado en RAW nada más salir de la cámara se puede ver a continuación.

Illas Cíes – RAW Original. © David García Pérez 2009.

La imagen en RAW carece de contraste y tiene unos colores muy pálidos (típico de un RAW, tener en cuenta que al contrario del JPEG, el RAW no está procesado por el software interno de la cámara). Por otra banda, estando aprendiendo de aquella a exponer, no está muy bien expuesta, el histograma está muy a la izquierda, con zonas que son casi negro puro, esto, a parte de hacer que se pierda detalle hace que aumente el ruido, cosa que podría haberse solucionado en cierta forma si hubiésemos dejado más tiempo de exposición. Próximamente os indicaré como pasé del RAW original a la imagen que os mostré en al principio del artículo.

P.D.: Esta imagen también lo podéis observar aquí: Illas Cíes, como podéis observar borré un par de cosillas en ella, básicamente más gente de la asociación que estaba en medio de la toma. Como soy bastante patoso con la herramienta de clonning en Photoshop, voy a obviar eso en esta serie de artículos.

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